Han sido pocos los estudios que ahondan en el hecho religioso desde una óptica social y cultural, que miran transversalmente la sociedad desde los rincones menos evidentes. Este es el caso del presente libro, el cual, apoyado desde un gran acervo documental, muestra lo más recóndito de la religiosidad popular, para así acercarnos con mayor precisión a la mentalidad religiosa colonial. La religiosidad popular no se refiere exclusivamente a las expresiones religiosas de los sectores subalternos, es por sobre todo, la manifestación común a una población sin jerarquías eclesiásticas y que no tiene distingo socioeconómico.
El presente texto da cuenta de la religiosidad popular estudiando el caso de Cali en la primera mitad del siglo XVIII, analizando las vivencias de fiestas de santos, milagros, pero por sobre todo (de ahí lo más interesante) los escándalos y las transgresiones pues la religión impuesta por el catolicismo no fue asumida plenamente por la población, pues siempre hubo resistencias, reacomodaciones, interpretaciones, pactos, llegándose a unas prácticas religiosas no ortodoxas. Apoyado en un minucioso trabajo en el Archivo Histórico Municipal, recoge además un importante número de testamentos (78), en el que quedan plasmadas las visiones de la vida y de la muerte de las personas de mayores recursos económicos de la ciudad de Cali y particularmente las estrategias utilizadas por estas para obtener la salvación.