Empiezas a parecerte al doctor Pangloss, observó Ferguson una noche. Todo ocurre siempre para bien, en el mejor de los mundos posibles.
No, en absoluto, repuso Amy. Pangloss es un optimista estúpido, y yo soy una pesimista inteligente, es decir, una pesimista con ocasionales destellos de optimismo. Casi todo ocurre para mal, pero no siempre, ya ves, nada es nunca para siempre, pero yo siempre espero lo peor, y cuando lo peor no ocurre me llevo tal alegría que parezco optimista. Podría haberte perdido, Archie, pero no ha sido así. Eso es en lo único que pienso ahora: en lo feliz que soy por no haberte perdido.