Nadie la oyó gritar…
El cadáver decapitado y mutilado de una mujer es encontrado en el barrio de Chinatown en Boston.
Las únicas pistas que tienen la detective de homicidios Jane Rizzoli y su compañera, la médico forense Maura Isles, son dos hebras de pelo gris plateado —no humano— que se han adherido al cuerpo. Pero pronto descubrirán que esa muerte violenta ha tenido una escalofriante precuela.
Diecinueve años antes un brutal asesinato, seguido de un suicidio, dejó cinco muertos. Una mujer vinculada a esa masacre sigue viva y guarda un secreto letal que la ha puesto en el punto de mira de alguien o algo muy maligno.
Para resolver un crimen con ecos aterradores de una antigua leyenda china, Rizzoli y Isles deberán ser más listas que un enemigo invisible con siglos de astucia…