Josefina Vicens

  • Rebeca Jared Medina Gonzálezцитирапреди 2 години
    Esa misma noche, cuando todos se acostaron, salí de casa. La playa estaba solitaria y oscura. Me tendí en la arena.

    Sollocé inconsolable por lo que se me moría, antes de vivirlo. Sin saberlo, creyendo que lloraba por mí, en realidad lloraba por los dos más agrios dolores del hombre: el amor y el adiós.

    No lloraba por mi, por ti.. sin saberlo, lloraba por los más agrios dolores del hombre: el amor y el adiós.

  • Santiago Romeroцитирапреди 2 години
    Creo que los que saben que nada tienen lo tienen todo: la soledad compartida, la fraternidad en el desamparo, la lucha y la búsqueda.
  • Santiago Romeroцитирапреди 2 години
    No escribir. Nada más. No escribir. Ésa es la fórmula. Y levantarme ahora mismo, lavarme las manos y huir. ¿Por qué digo huir? Simplemente irme. Tengo que ser sencillo. Debo irme. Así no tengo que explicar nada. Debo poner un punto y levantarme. Nada más. Un punto común y corriente, que no parezca el último. Disfrazar el punto final. Sí, eso es. Aquí.
  • Santiago Romeroцитирапреди 2 години
    Entonces me da miedo hablar. Quisiera que bastara con acercarme a ella y mirarla profundamente. ¡Las palabras!
  • Santiago Romeroцитирапреди 2 години
    Yo pretendo escribir algo que interese a todos. ¿Cómo diría? No usar la voz íntima, sino el gran rumor.
  • Santiago Romeroцитирапреди 2 години
    Escribir es decir a otros, porque para decirse a uno mismo basta un intenso pensamiento y un distraído susurro entre los labios.
  • Santiago Romeroцитирапреди 2 години
    mi mujer guarda las cosas más inverosímiles, las que parece que jamás han de servir para nada y que, no obstante, sirven siempre. Las esposas de los hombres pobres son un poco mágicas.
  • Santiago Romeroцитирапреди 2 години
    Sé que muchas gentes prosperan: gente ambiciosa y capaz. Pero realmente, yo no sé cómo lo consiguen. No tengo ninguna idea de los negocios. Nada percibo de ellos. El comercio, aun el más lícito, me da vergüenza.
  • Santiago Romeroцитирапреди 2 години
    Lo lamento; no puedo soportarlo. Sufro por el que vende y por el que compra. Me parece que aquél hace un esfuerzo para ponderar su mercancía; que tiene que vencer su modestia y su buen gusto por la necesidad de ganar algo más; y que el comprador tiene también que realizar un esfuerzo para ocultar su pobreza; toma entonces una anticipada postura altanera, para que el regateo parezca malicia y no miseria.
  • Santiago Romeroцитирапреди 2 години
    Recuerdo que a medida que mi padre hablaba me invadía una especie de asfixia: por lo que decía y por cómo lo decía. Fue la primera vez que sentí el horror de estar encarcelado, condenado sin remedio.
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