Marcela Santos

antes que el cielo vi ondear
la bandera de Windows 98

todo apunta a que las únicas
que se abren paso
al infinito de la vida
inacabable que trascienden
los planos de la realidad
hasta desaparecer
son las carpetas de investigación.

Cuando dijiste que el muro de la Cineteca Nacional
parecía una pantalla descompuesta supe
que en cualquier lugar veríamos la misma estática

no somos de los que se regresan

algo tuvo que jalarnos lejos
una especie de fuerza aplicada
algo más potente que ir a estudiar
historia o no poder escribir
como Reyes
con tremendo calorón

La chava del Río la Silla

a nadie se arrojaría a los rieles
mientras avanza el vagón del metro
sabiendo que hay miles de suicidios
de mejor calidad
y con más reproducciones

Los finales felices
a veces salpican
en la calle.

Nunca llegamos a tiempo
nos aturden los caminos ilegibles
estas calles no son mías
pero son nuestros los pasos
que ahora
yo a los veinticinco tú a los treinta
nos preocupa contar genuinamente

aún no eres mi familia
hay tan poco de mí misma en tus palabras
pero insisto
sigamos obsequiándonos al mundo
caminemos

Periférico es un círculo perfecto

y ninguna avenida puede superar
Reforma