Federico Fabregat

Si fracasas procura que tu fracaso sea monumental.

La percepción y no los hechos —o la realidad— es lo que define el curso de nuestras acciones y lo que definitivamente marca el juicio de los demás ante cualquier evento.

Muchos adultos —pertenecientes a clases medianamente pudientes— demuestran un pronunciado y curioso interés por la comida. Las conversaciones se refieren a restaurantes, bebidas y platillos la mayor parte del tiempo. ¿Se asoma una receta para aderezar el vacío?

Las drogas persiguen y exigen un cambio —expandir, agredir, sanear, mover, redimir— en nuestra naturaleza interna. He ahí su único triunfo en este paraíso de parálisis. Porque eso precisamente persiguen los enervantes: una nueva naturaleza interior, un movimiento recóndito intrínseco, querámoslo o no.

Las leyes operan de dos maneras: a unos los someten y a otros los protegen.

La cama es un portal dimensional enano, menospreciado por la mayoría.

¿Quién le quita a uno el derecho de venir a este mundo a destruirlo?

A las mujeres con las que he entablado una relación o se han cruzado conmigo en algún momento de la vida: a todas ellas he engañado.

La vida adulta se refiere, exclusivamente, a dotar de complejidad las cosas más fútiles.

Vulgar resulta permanecer maniatado por las leyes de la moral imperante sin cuestionarlo todo.